El sueño europeo ha terminado. El Barça ha sido eliminado de la Liga de Campeones tras perder por 1-4 contra el Paris Saint-Germain en el Estadi Olímpic Lluís Companys, a pesar de tener una ventaja previa de 3-2 del partido de ida.
El encuentro, marcado por la roja a Ronald Araújo en el minuto 29, había empezado bien para los de Xavi Hernández, dominando y con un gol tempranero de Raphinha, pero la expulsión desequilibró al equipo. Lo que parecía ser un posible retorno a las semifinales de la Champions, tras 5 años de ausencia, se convirtió en una lucha constante. El Barça, normalmente sólido y confiado, se vio obligado a jugar a la defensiva, perdiendo el control y mostrando signos evidentes de fatiga y frustración.
El Barça perdía, con 60 minutos mínimo por jugar, a su mejor marcador. En caliente el uruguayo, que puso su manos sobre el hombro del joven extremo galo, optó por intentar evitar el gol. Lo que vino fue peor. En el 40, desde el segundo palo y de primeras con la derecha, Ousmane Dembélé respondió a los abucheos continuados con un gol que empataba el partido. Su segundo gol en esta Champions, también el segundo ante su exequipo. Y tan solo el tercer tanto en toda la temporada, con un único 'but' previo a su doblete contra el Barça anotado frente al Mónaco, en la Ligue 1.
En un partido repleto de tensión, el Barcelona sufrió enormemente antes del descanso con el PSG poniendo en jaque su portería. El extremo francés del PSG estuvo a punto de marcar el 1-2, pero su disparo rozó el poste derecho, para alivio del portero Marc-André ter Stegen. Poco después, Bradley Barcola también tuvo una oportunidad que se desvió tras superar a Koundé. Al término de la primera mitad, el Barça estaba claramente desbordado y necesitaba reagruparse durante el descanso.
Sin embargo, cualquier esperanza de recuperación se desvaneció rápidamente tras el descanso. Fabián Ruiz casi anotó al inicio, con un disparo que también rozó el poste. El PSG mantuvo la presión y, en el minuto 55, Vitinha, quien ya había marcado en el partido de ida, encontró el gol con un tiro cruzado desde lejos. Poco después del gol, Ilkay Gündogan tuvo la oportunidad de igualar, pero su tiro golpeó el poste, con el portero Donnarumma ya vencido.
La situación se complicó aún más para el Barça cuando su entrenador, Xavi, fue expulsado por conducta impropia junto al entrenador de porteros, José Ramón de la Fuente. La mala suerte del Barcelona continuó cuando João Cancelo cometió un penalti innecesario sobre Ousmane Dembélé, lo cual permitió a Kylian Mbappé dar la ventaja al PSG desde los 11 metros.
A pesar de algunas mejoras en su juego respecto a temporadas pasadas, el Barça no pudo superar a un PSG que supo capitalizar los momentos clave. Ter Stegen destacó por evitar un marcador más abultado (salvo el 1-4 de Mbappé), pero no fue suficiente para evitar la eliminación azulgrana, en un partido donde todo pareció ir en su contra.
Xavi: "La expulsión revienta la eliminatoria"
En rueda de prensa, el técnico blaugrana se quejó que la expulsión de su jugador Ronald Araujo a la media hora de juego, con 1-0 en el marcador más el 2-3 de la ida, fue lo que hizo "reventar" la eliminatoria ya que cree que el partido, que terminó 1-4, cambió por completo al tener que jugar diez contra once, algo que ve "imposible" en estos niveles, en un cruce de cuartos de final de la Liga de Campeones.