VIDEO | Fuencisla Clemares: ''La innovación no sólo sucede en un departamento de I+D''

CEDE entrevista a Fuencisla Clemares, directora general de Google en España y Portugal

Licenciada en Empresariales y MBA por el IESE en el año 2000, Fuencisla Clemares comenzó su carrera profesional en McKinsey&Company y tras 7 años, se incorporó a Carrefour como Directora de Compras liderando la estrategia comercial y la relación con los proveedores de la División de Casa-Hogar.

En 2009, Clemares se incorporó a Google España como Directora de Retail y Bienes de Consumo. En noviembre de 2016, asumió el cargo de Directora General de Google en España y Portugal.

En febrero de 2018, se convirtió en miembro del consejo directivo de la Asociación de Empresas de Gran Consumo (Aecoc).

Desde 2002, Clemares ha estado involucrada en diversas iniciativas relacionadas con la igualdad de temas de género en el ámbito empresarial, su labor ha sido reconocida por distintos medios e instituciones, habiendo recibido distintos premios como el “Premio Liderazgo Mujer Directiva 2017” de la Federación Española de Mujeres Directivas, Ejecutivas, Profesionales y Empresarias (FEDEPE).

Además de sus responsabilidades ejecutivas, participa en actividades de formación en el Programa Máster de IESE (Universidad de Navarra) y ejerce como profesora en el Instituto Superior para el Desarrollo de Internet (ISDI).

- Se incorporó a Google en 2009, y durante su trayectoria ha desempeñado diferentes roles de responsabilidad dentro la compañía hasta convertirse en Directora General de una de las empresas líderes a nivel mundial, ¿cree que eso ha influido en su modelo de liderazgo?, ¿cuál considera que es su modelo de liderazgo?

Mi modelo de liderazgo se basa en construir equipos de alto rendimiento. Para eso, tienen que ser equipos muy diversos, asegurándonos que rompemos silos entre los distintos departamentos. Cuando se toman decisiones, no es de forma individual, sino que siempre debemos pensar en el bien de la compañía.

Se fomenta mucho la toma de riesgos y no se castiga el error, sino que se ve en términos de aprendizaje. Eso me parece absolutamente fundamental en el entorno en el que estamos viviendo. También, y con una mirada un poco más de medio plazo, tenemos que asegurarnos que trabajamos de forma sostenible. Eso quiere decir que tiene que haber tensión, que tiene que haber presión y que se genera motivación para trabajar rápido y bien, pero siempre mirando el bienestar de las personas.

- Tiene una trayectoria impresionante y ha estado en diferentes puestos de trabajo. Es difícil elegir solamente un referente, pero ¿qué líderes o personas relevantes le han inspirado?

Cuando pienso en mis referentes, y es una cuestión que creo que me he hecho en distintos momentos, no me sale una imagen única. Yo, a lo largo de mi carrera profesional, he ido cogiendo ejemplos y referentes de todas las personas con las que he interactuado.

He aprendido de mis jefes, por supuesto, pero también he aprendido muchísimo de mis clientes y de mis equipos, y son los que me enseñan cada día y me hacen una mejor líder. De clientes, he aprendido cómo llevar la ejecución. Cuando estaba en McKinsey, aprendí a cómo ser muy rápidos ejecutando proyectos estratégicos y proyectos de transformación. De mis equipos, he aprendido a escuchar mejor y a comunicar. De cada uno voy cogiendo cosas que me inspiran.

- Google está en el top ten del ranking mundial de las empresas más innovadoras, como Directora General de Google España, ¿qué consejo les daría a los directivos para impulsar la innovación dentro de las compañías?

Yo soy de las que piensa que la innovación no sólo sucede en un departamento de I+D. La Innovación tiene que venir, y puede venir, de absolutamente cualquiera dentro de la organización. Bajo ese pensamiento, lo que es clave, es la cultura y la actitud de la organización.

Cómo fomentas esa toma de riesgos, cómo generas momentos de escucha, por donde pueden los empleados elevar sus ideas, cómo se valoran esas ideas, o cuando se innova en una parte de la compañía, cómo eres capaz de escalarlo, son temas clave. Yo creo que la innovación, si se queda solamente en un departamento y no escala, no tiene el impacto que tiene que tener.

La forma en la que se reconoce y se da visibilidad a esas personas que están aplicando los comportamientos que tú quieres promocionar en el día a día, y que realmente tienen un impacto, para mí son los elementos claves que hacen que la empresa sea innovadora en general y a todos los niveles. Quizás, otro tema importante es que no solo se innova cuando sale el último producto o servicio, se puede innovar a nivel de políticas, a nivel de procesos, a nivel de cómo se trabaja en el día a día. Realmente, para mí, la forma de pensar en la innovación es que es muy amplia.

- La imparable innovación digital y la globalización demandan nuevos perfiles necesarios, lo que supone una gran oportunidad para los jóvenes que se están preparando actualmente. ¿Están encontrando dificultades a la hora de incorporar nuevos perfiles en Google, sobre todo, entre las capas más jóvenes?

Afortunadamente seguimos teniendo una grandísima marca como empleador, y la verdad es que somos capaces de captar el talento que necesitamos. En ese sentido, creo que la gente cada vez se interesa más por pensar en “¿cuál es el proyecto en el que voy a participar?”, “¿cuál es el impacto que voy a tener?”. Y, en este sentido, yo creo que la historia de Google sigue siendo muy atractiva.

- Aunque cada vez vemos más presencia femenina en los ámbitos de toma de decisiones, es evidente que sigue existiendo un techo de cristal importante en el ámbito empresarial que frena el ascenso de las mujeres a puestos de responsabilidad. Usted es una firme defensora de la equidad de género y del papel de la mujer en las organizaciones, ha recibido numerosos reconocimientos por su estilo de liderazgo y su contribución a visibilizar a la mujer directiva. ¿Cómo se puede impulsar el talento femenino tanto desde el ámbito público como desde el privado? ¿Qué debemos hacer como sociedad para acabar con el techo de cristal en las organizaciones?

Hemos mejorado mucho, tanto a nivel de diversidad como de desarrollo en las carreras profesionales de las mujeres. Es un tema tremendamente complejo, y creo que tenemos que seguir trabajando, lo que pasa es que hay que trabajar distintos prismas. Hay uno clave que empieza por dar visibilidad al talento femenino para que las mujeres tengan referentes. Y, si los referentes siguen siendo eminentemente masculinos, es complicado que movamos la aguja.

Sabemos que es importante trabajar en políticas de conciliación, pero también hay que trabajar en la corresponsabilidad con el hombre. A nivel social, mientras la mujer siga pensando que es ella la que se tiene que encargar del cuidado de la familia, creo que vamos a seguir teniendo problemas; tiene que haber mucha más corresponsabilidad y las tareas se deben repartir. A nivel privado, tenemos que seguir mejorando y adaptando las políticas de atracción, desarrollo y promoción del talento, y con ese prisma de talento femenino, encontrar cuáles son las piezas de esas políticas, para fomentar y retener ese talento.

Yo creo que la buena noticia es que cuando prestas atención a todos estos detalles, ves que las cosas cambian. Otro tema importante es el desarrollo del networking, de programas de mentalización y de coaching específico para mujeres. Sabemos que este tema ayuda, porque a veces nos cuesta más tomar riesgos y dar ese salto por falta de confianza. Los programas tienen un impacto genuino, y creo que tenemos que seguir empujando este tipo de palancas porque están funcionando y porque vemos que avanzamos.

- Tenemos cierto interés en conseguir que nuestras niñas y adolescentes estudien carreras técnicas. ¿Considera que el foco tiene que estar ahí?, ¿para usted, es importante? 

Sin ninguna duda necesitamos tener más mujeres en el sector tecnológico. Si vemos cómo evoluciona nuestra sociedad y el impacto que está teniendo la tecnología, sabemos que la industria tecnológica es la que más oportunidades y empleos va a generar, generalmente mejor pagados. Por ello, o incorporamos a la mujer a esta industria o el problema es que vamos a agrandar la brecha de género. Por lo tanto, es responsabilidad de todos asegurarnos que las niñas de 15-16 años que eligen qué van a estudiar, se sientan genuinamente atraídas por trabajar en esta industria, y, por lo tanto, por desarrollar conocimiento técnico.

- Además de la diversidad, la sostenibilidad es otro de los grandes desafíos que tenemos por delante como sociedad, y la IA está siendo una palanca que ayuda a conseguir estos objetivos. Es imprescindible impulsar empresas sostenibles que tengan en cuenta los aspectos medioambientales y sociales, además de los económicos, para crear un valor a corto y largo plazo. Desde Google, ¿cuál es vuestra visión estratégica en este sentido?

Hemos empezado por nosotros en todo lo que tiene que ver con sostenibilidad, asegurando que dábamos un gran ejemplo y que marcamos un camino para otros. En este sentido, nosotros llevamos trabajando en sostenibilidad muchos años y, hoy por hoy, tenemos la nube más verde del mercado.

También ponemos a disposición nuestra tecnología y nuestros algoritmos, para que otras empresas lo apliquen en casos en los que les ayude a ser mucho más sostenibles. Te pongo el ejemplo: hemos trabajado con UPS, con algoritmos de inteligencia artificial, optimizando las rutas y ahorramos millones de galones en combustible, pero también en emisiones de CO2 al año. Este es el potencial que tienen estas tecnologías.

- ¿Qué políticas hacen falta en España y Europa sobre Inteligencia Artificial para ser competitivos a nivel global?

En cuestión de políticas y regulación, para mí el primer mensaje importante es que en la inteligencia artificial es clave que haya más regulación, porque tiene una gran oportunidad por delante, pero también tiene riesgos que tenemos que ser capaces de gestionar de forma proactiva.

Ahora lo importante es que se regule bien, y cuando decimos que se regule bien, es que esa regulación nos ayude a limitar esos riesgos, pero que no tenga consecuencias no esperadas en todo lo que tiene que ver el impacto, la limitación de las oportunidades y la transformación que puede traer, que es beneficiosa para nuestra sociedad y para Europa, y puede contribuir muy positivamente a la competitividad de Europa. En este sentido, necesitamos una regulación que sea única, que sea sencilla, que sea sostenible en el tiempo y que se enfoque, no tanto en regular la tecnología, sino los usos que se hacen de esa tecnología.

- ¿Consideras que Europa está en una buena posición actualmente, o tendría que empujar más los temas tecnológicos? 

Yo creo que Europa tiene una gran oportunidad ahora mismo, y que se gestiona bien. Nosotros hemos cuantificado esa oportunidad en un estudio, y decimos que la inteligencia artificial puede contribuir en 1.2 billones españoles a la economía, y que puede generar eficiencias y ahorrar a los empleados 70 horas de trabajo al año, es decir, el equivalente a dos semanas de trabajo. Por lo tanto, yo lo quiero ver en términos de oportunidad. Si se invierte, regula y acompaña con las políticas adecuadas, esa oportunidad la vamos a poder capturar.

- Para terminar, ¿qué mensaje les daría a las nuevas generaciones para que puedan encontrar su propósito y objetivo profesional?

Cuando tiene que ver con las carreras profesionales de los jóvenes, yo siempre les digo que al final lo importante es que busquen un sitio donde aprendan. La clave es aprender y crecer. Cuando dejas de aprender, es el momento de pensar en un en un nuevo cambio. Y, quizás, el segundo consejo es que se rodeen de gente extraordinaria en lo personal y en lo profesional, que también marca tu carrera. Para mí, esos son los temas importantes: gente buena a tu alrededor y aprendizaje continuo.