El mercado laboral español enfrentó desafíos significativos durante el primer trimestre de 2024, marcando su peor desempeño en cuatro años. Los obstáculos tradicionales que suelen surgir al inicio de cada ejercicio se vieron acentuados este año, impactando tanto en la tasa de empleo como en el desempleo en el país.
Según datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la tasa de paro aumentó cinco décimas respecto al trimestre anterior, alcanzando un 12,3%. Este incremento representa el mayor aumento en cuatro años, evidenciando una salida laboral más complicada de lo habitual. En cifras absolutas, actualmente hay 2,9 millones de personas desempleadas en España, destacando la persistente problemática del desempleo juvenil con una tasa del 27,7% entre los menores de 25 años.
El panorama del empleo también reflejó dificultades, con una reducción de 139.700 personas ocupadas durante el trimestre, marcando el mayor recorte desde 2020. Este descenso se observó en todos los sectores económicos, siendo especialmente notable en servicios, industria, agricultura y construcción. Además, el impacto fue mayor en las mujeres, con 86.800 menos empleadas en comparación con 52.900 menos hombres. A pesar de la disminución en el número de personas trabajando, se registró un aumento en la jornada laboral media, que alcanzó las 36,1 horas semanales.
En el ámbito regional, Cataluña experimentó una pérdida de 17.000 ocupados durante el primer trimestre, elevando su tasa de paro tres décimas hasta un 9,5%. Aunque estos números reflejan una contracción estacional, desde la Generalitat se destacó la tendencia positiva de los últimos meses, señalando que Cataluña ha liderado la creación de empleo en el último año a nivel estatal.
A pesar de estos desafíos, se vislumbran buenas perspectivas para el resto del año 2024. Aunque el inicio del año fue complicado, España logró mantener la cifra simbólica de 21 millones de ocupados, demostrando un buen momento para el mercado laboral en general desde su recuperación post-COVID. Aunque se anticipa una desaceleración en la creación de empleo, se espera que la dinámica laboral siga siendo una de las más sólidas en Europa.
La Encuesta de Población Activa (EPA) también arroja datos mixtos, con un aumento de la población activa pero también un incremento en el número de hogares con todos sus miembros activos en paro. España sigue enfrentando desafíos en términos de desempleo, siendo aún el país de la UE con la mayor tasa de paro. Sin embargo, se observa una mejora en el paro de larga duración durante este trimestre.