El Ayuntamiento de Girona y un grupo promotor estratégico liderado por la fundación Support-Girona han puesto en marcha un proyecto transversal para convertirse en una ciudad inclusiva y promotora de la vida independiente en comunidad, que contará también con la colaboración de la Universitat de Girona (UdG). Además, también se quiere conseguir que Girona sea una ciudad amiga de las personas mayores.
Así, Girona se ha convertido en la primera ciudad del conjunto de Cataluña que suscribe esta declaración institucional con la intención de trabajar para crear espacios de gobernanza interadministrativa con entidades y agentes clave, y para impulsar actuaciones y servicios de experiencia piloto innovadoras.
El alcalde, Lluc Salellas, ha destacado durante su intervención que “tenemos el propósito de crear ciudades más accesibles, acogedoras e inclusivas para todas las personas. Queremos hacer de Girona una ciudad en la que se viva mejor, donde todo el mundo pueda desarrollar su proyecto de vida con dignidad”.
Por su parte, la concejala de Ciudad que Cuida del Ayuntamiento, Gemma Martínez, ha remarcado que “esta declaración es fruto del trabajo colectivo, de mucha gente pero sobre todo de muchas entidades. Hoy no hablamos de asistencia, hablamos de ejercer derechos, que todos puedan desarrollar sus proyectos de vida con normalidad”.
La declaración consta de 10 compromisos. Por un lado, se impulsarán acciones para priorizar la dotación de los servicios sociales alternativos; para garantizar el acceso a la vivienda en entornos comunitarios inclusivos y accesibles; para asegurar el acceso de todos en la movilidad, las tecnologías y el resto de servicios, y para favorecer las oportunidades de empleo y la promoción profesional.
Asimismo, se trabajará para garantizar la participación política y pública, así como la participación en la vida cultural, artística, recreativa, de esparcimiento y deportiva. También se llevarán a cabo campañas de sensibilización para fomentar actitudes receptivas y positivas respecto a los derechos de todas las personas, y se promoverá la formación de los y las profesionales y el personal propio del Ayuntamiento sobre los derechos humanos.
Por otra parte, se promoverán y establecerán alianzas de proximidad y marcos de cooperación internacional con otros municipios y entes locales, para compartir conocimientos y experiencias en la realización efectiva del derecho a vivir de forma independiente a la comunidad y con el propósito de crear ciudades más accesibles, acogedoras e inclusivas para todas las personas.
Por último, se elaborará y aplicará el Plan de Transición por el Derecho a la Vida Independiente en la Comunidad, que se llevará a cabo en colaboración con diferentes entidades para hacer efectivos los compromisos de la declaración institucional. La UdG se encargará de realizar un estudio de necesidades para redactar este plan. Este diagnóstico inicial evaluará la situación que viven las personas con diversidad funcional y la gente mayor y en qué grado Girona ya proporciona un envejecimiento activo, y una recopilación de mejoras para ambos colectivos. El conjunto del proyecto será participativo e intervendrán personas mayores y con capacidades diversas, entidades, personal técnico, representantes políticos y agentes clave del municipio.
A partir de la información que proporcione este diagnóstico, Girona podría optar a formar parte de la Red Mundial de Ciudades Amigables con las Personas Mayores de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y, de ser así, se convertiría en el primer municipio de la demarcación que entraría.