Una biblioteca con el libro de 'Historia del Sáhara español' en el centro

Kissinger no organizó, ni conoció la 'marcha verde' ('Historia del Sáhara español')

Kissinger no organizó, ni conoció la “marcha verde” (“Historia del Sáhara español”, Muñoz Lorente) Un nuevo estudio histórico sobre la colonización española del Sáhara Occidental en el que su autor utiliza la documentación desclasificada por Estados Unidos

Muchos años después de la publicación de la obra enciclopédica obra histórica de José Ramón Diego Aguirre otro intrépido historiador se ha propuesto escribir una nueva historia del Sáhara que fue español ,si bien en su caso ciñéndose al período concreto de la presencia española en dicho territorio de África Occidental. Pese a ello, en Historia del Sáhara español. De la colonización al abandono 1881-1976 (Almuzara) Gerardo Muñoz Lorente dedica una primera parte a la etapa prehispánica, pero el resto de la obra, que alcanza cumplidamente al 700 páginas, se refiere a la centuria escasa en que estuvo vinculado con nuestro país. Y hay que añadir que la mitad de dichas páginas se ocupan de la ultima etapa, es decir, la de a descolonización que muy atinadamente califica de apresurado y al subsiguiente abandono.

Para escribir esta obra Muñoz se ha investigado en profundidad en los archivos españoles, pero la verdadera novedad, y por ende el mayor interés, es la documentación que aporta como consecuencia de la apertura de numerosos archivos de Estados Unidos país que, como se sabe, tuvo una notable importancia -bien que no necesariamente decisiva- en la retirada española. El autor ha utilizado la documentación desclasificada por la CIA, así como la del departamento de Estado, Archivo de la Nación, Bibliotecas Ford y del Congreso, fuentes que le han permitido acceder a la transcripción de conversaciones mantenidas por Kissinger con el presidente norteamericano y los jefes de Estado y ministros de Asuntos Exteriores de los países implicados en el contencioso -el principal, Cortina Mauri-, correspondencia entre los embajadores de Estados Unidos y su jefe y un largo etcétera. De entre todo este material cabe destacar la reproducción como último anexo de su obra del Memorando de 6 de septiembre de 1974 de la Oficina de Inteligencia Nacional para Oriente Medio redactado por la CIA y el Departamento de Estado.

Dos puntos hay particularmente novedosos. Uno, la revelación de cierta conversación mantenida entre Ford y su secretario de Estado sobre la que, debidamente transcrita, Muñoz dice que “no parece que, siendo secreta, se vislumbre siquiera la sospecha de que Kissinger conociera de antemano el plan de Hassan II de emprender la marcha verde y mucho menos de que la organizase o autorizase”. Esta opinión descarga al entonces secretario de Estado, por cierro recientemente fallecido, de responsabilidad alguna en la añagaza organizada por el monarca marroquí para chantajear a España. Aunque también es muy cierto que de las conversaciones y documentos desclasificados se colige muy claramente que Kissinger era enemigo de la existencia un futuro estado saharaui porque no creía en la autodeterminación de nos pocos miles de personas y consideraba que habría de ser un estado tan inviable como Alto Volta o Guinea Bissau.

Otro, una presunta invasión marroquí del Sáhara español a principios de octubre de 1975 que Kissinger habría desaconsejado seriamente a Hassan II el día 4. “Si los planes de invasión iban en serio -dice el autor- la intervención estadounidense impidió que se llevaran a cabo”. Dos aportaciones, en suma, importantes para la historiografía sobre la que fue 53ª provincia española y que, medio siglo después de su desgajamiento material -que no jurídico- de la metrópoli, sigue aún sin descolonizar.