Pablo-Ignacio de Dalmases con su libro

Pablo-Ignacio de Dalmases: ''A Federico García Lorca no lo mataron por homosexual''

CatalunyaPress entrevista a Pablo-Ignacio de Dalmases, quien ha estrenado su nuevo libro, 'Los novios de Federico'

Federico García Lorca, poeta, dramaturgo y una figura emblemática de la literatura española del siglo XX, es una figura que trasciende las fronteras del tiempo y del espacio con su obra inmortal.

Su legado perdura como un faro de creatividad, pasión y humanidad, iluminando tanto a sus contemporáneos como a las generaciones venideras. Pero la perdurabilidad de Lorca va más allá de su genio literario.

Su compromiso político y social lo convirtió en una voz disidente durante la turbulenta época de la Guerra Civil española. Lorca, defensor de la democracia y los derechos humanos, pagó un alto precio por sus convicciones: acabó siendo fusilado en 1936 a manos de los falangistas. 

Los motivos por los que acabó siendo asesinado fueron varios, pero uno que se ha destacado siempre es el hecho de ser homosexual. Sin embargo, en el libro recién publicado de Pablo-Ignacio de Dalmases, Los novios de Federico, se intenta demostrar que, realmente, no fue así. 

El Doctor en Historia por la Universidad Autónoma de Barcelona ha empleado dos años para investigar más profundamente en la vida y los amoríos del poeta más influyente del siglo pasado, y cómo las contradicciones entre lo que pensaba y las compañías con las que se rodeaba acabaron siendo una tónica hasta el final de sus días. 

  • ¿De dónde viene esta motivación para investigar la vida amorosa de García Lorca?

No lo sé. Yo he escrito mucho de África, de viajes, ficción... pero nunca sobre temas de García Lorca. Sin embargo, me di cuenta que las relaciones sentimentales que había tenido Federico acabaron con una deriva ideológica completamente contraria a lo que había puesto su pensamiento, y eso me llamó mucho la atención. 

Empecé a leer y pensé en hacer un artículo, pero al investigar a fondo, me di cuenta de que había muchas ramificaciones. Vas buscando documentación, y cada una te lleva a nuevos caminos y ahí llegué a la conclusión de que aquí había material suficiente como para hacer un libro. Se podría decir que salió de casualidad.

  • Después de haber escrito un libro sobre él, ¿cómo definirías a Lorca?

Lorca me parece un personaje fascinante. Siempre se habla de él recordando que fue un poeta y un dramaturgo extraordinario, pero era un hombre fascinante. Todas las personas que lo conocieron destacaron que era un personaje arrebatador, se quedaba contigo a la primera de cambio. Era muy simpático, sociable, tenía cualidades de conversación, sabía tocar el piano, dibujar... 

El primer autor que habló de su sexualidad fue un compañero suyo de la residencia de estudiantes de Madrid, José Moreno Villa, que después fue un artista plástico importante. En el 1944 publicó un libro en el que habló de forma un poco tangencial del "defecto" de Lorca, refiriéndose a su sexualidad. En el libro explica que "algunos recelaban de Federico por su defecto, pero cuando tomaba la palabra, se sentaba al piano o recitaba, todo el mundo quedaba maravillado". 

Es decir, es un hombre que tenía un encanto absoluto y arrebatador. 

Pablo-Ignacio de Dalmases con su libro
Dalmases destinó dos años a investigar a García Lorca | Catalunya Press
  • ¿Cómo vivió él su sexualidad? 

Parece ser que la vivió de forma bastante desinhibida, lo cual tiene su mérito porque en aquella época, ser homosexual era un baldón que te marcaba de por vida. Yo recojo el testimonio de un amigo suyo de Granada de su misma edad que también era gay, García Penón, y quien explicó que habían vivido lances y aventuras homosexuales juntos. Este amigo le pedía que tuviera cuidado porque "tú te vas a Madrid, pero yo me quedo en Granada". Si le gustaba un chico, se lanzaba rápidamente a conquistarlo, y si había que pagar, pagaba. 

Por lo tanto, vivió su homosexualidad de forma bastante desacomplejada, y eso lo marcó, sobre todo en Granada. Si hoy todavía en las capitales españolas todavía tienen ciertos reparos, no te digo yo lo que era en los años 30. Aquello era tremendo. 

"Vivió su homosexualidad de forma bastante desacomplejada, y eso lo marcó, sobre todo en Granada"

En Madrid se sintió más liberado y todas sus relaciones las tuvo aquí excepto una, un chico de Granada que conoció y con el que tuvo una relación, pero era empleado de banca y no se podía mover de la ciudad granadina. Con lo cual, fue una relación intermitente. 

  • ¿Cómo lo vivió su familia?

Eso no se sabe, parece ser que puso particular empeño en que su familia no se enterara, pero no me lo creo. En Granada, todo el mundo conocía la vida del resto, por lo que el eco debió haber llegado a su padre. De hecho, el primer viaje que hizo a Nueva York fue porque su padre notó algo extraño en él.

Federico tuvo varios desengaños amorosos, pero el más importante fue con el escultor Emilio Aladrén, quien no era exclusivamente gay, sino que era bisexual y se llegó a casar con una mujer inglesa. Esto le produjo a Federico un trauma tremendo. Tanto es así que sus amigos y su padre lo notaron.

El padre, que era muy inteligente, se fue a Madrid preocupado porque veía que a su hijo le pasaba algo. Fue a hablar con un amigo de Federico y le preguntó que qué le pasaba a su "Federiquito", y el amigo no quiso revelar muchos detalles del desamor que había sufrido, pero sí que argumentó que tenía "problemas literarios, le tenían celos, etc". El padre propuso enviarlo un tiempo al extranjero y el amigo lo vio como una idea "maravillosa". Aquí fue cuando se marchó a los Estados Unidos financiado por su progenitor.

  • ¿Por qué hay tanto interés en su vida, en su muerte, en su sexualidad…?

Por varias razones. La primera, por su categoría intelectual. Fue uno de los grandes escritores del siglo XX, una figura clave en la cultura española. Es un dato que, en cualquier otro autor, ya hubiera sido suficiente para suscitar interés.

Sin embargo, luego viene su tragedia personal. Es decir, fue asesinado a principios de la Guerra Civil; un hombre que era exitoso, que antes de llegar a los 40 años ya había alcanzado la fama y el prestigio internacional, que se le representaba en América... Era una figura clave en la intelectualidad española de los tiempos de la República. Su asesinato en los primeros tiempos de la Guerra Civil lo convirtió en un icono, en una figura mítica y legendaria. 

Su asesinato en los primeros tiempos de la Guerra Civil lo convirtió en un icono, en una figura mítica y legendaria. 

También podríamos destacar, aunque yo creo que era un aspecto secundario, su propia sexualidad. Ha habido muchos otros artistas que han sido homosexuales y en ellos ha sido algo secundario. Incluso se ha dicho que su sexualidad fue el motivo de su muerte, pero no es cierto. A Federico García Lorca no lo mataron por homosexual, fue asesinado por razones ideológicas en unos momentos en el que "eras de los míos o eras de los otros". No había territorios intermedios. En aquel momento de la sublevación, dijeron que "era de los otros", así que ¡PUM!, lo fusilaron y punto. ​​​​​​

  • Uno de los mayores mitos amorosos fue la relación entre Lorca y Salvador Dalí. ¿Qué hubo de cierto en ello?

Es totalmente cierto que tuvo una relación con Salvador Dalí, se puede decir que fue su primer novio. Lo que pasa es que hay un autor que dice que el problema que tuvo Lorca en todas sus relaciones fue que siempre se enamoró de la persona inapropiada. La mayoría fueron bisexuales, excepto el último, pero fue la relación más corta y no pudo completarse porque a él lo mataron rápidamente.

Dalí es un personaje muy complejo en todos los aspectos de la vida: como artista, como persona, por su ideología... y también por su sexualidad. ¿Qué era Dalí, desde el punto de vista sexual? No está nada claro. Yo dedico un capítulo final al itinerario sentimental posterior de todos sus amantes, y quien más espacio ocupa es Salvador. Sabemos que se casó con Gala a final de los años 20, es decir, poco después de conocer a Federico. ¿El matrimonio con Gala fue un matrimonio en el sentido convencional del término, en el que había una atracción personal, intelectual, moral, sentimental y física? Resulta dudoso de creer. 

Pablo-Ignacio de Dalmases con su libro
Salvador Dalí, uno de los protagonistas del libro | Catalunya Press

¿Fue Dalí gay? Quizá tampoco. Hay testimonios que lo conocieron posteriormente, ya en los años 60 y 70, cuando ya era un personaje famoso, que lo que dan a entender es que se trataba de un hombre impotente o 'voyeur', un amante del onanismo, de la masturbación... más que del sexo físico, de la autocomplacencia. 

Es cierto que él dijo cosas de Federico feas, pero García Lorca se desquitó. Cuando le dijeron que "Dalí no era gay", él contestó que "no lo sería, pero solo se le ponía tiesa cuando le metes el dedo por el culo".

Incluso Dalí, a veces, casi se denuncia a sí mismo. En algunas declaraciones de los años 60 le preguntaron por su relación con Federico y él contestó que el poeta "quiso poseerle, pero no pudo porque le hacía daño". Si te hacía daño es porque tú permitiste que lo probara. Fue una sexualidad muy compleja, era un personaje muy dificil de interpretar. 

  • Otro de sus grandes amores fue Emilio Aladrén. En el libro explicas que llegó a sufrir depresión porque no era del todo correspondido. ¿Fue ese el amor más importante para el poeta?

Eso dicen. A mí me resulta curioso porque hay un problema de fechas. Creo que fue una relación relativamente corta, dudo que fuera superior a dos años. Con Dalí estuvo más tiempo, por ejemplo. Fue una relación rara, pero por lo visto, fue muy apasionada. Los autores dicen que fue el gran amor de su vida, dicen que era guapísimo, y yo que he visto fotos de él, diría que tenía aspecto de mafioso siciliano, pero era guapo, muy exótico. 

  • ¿Cómo fue su relación con las mujeres?

Fue buena, Lorca describe muy bien a las mujeres en su obra literaria. Tuvo muy buena relación de amistad con mujeres en Granada e incluso se dice que llegó a tener una relación sexual. En la época en la que estuvo con Dalí, intentó tener relaciones con él pero el pintor no quiso. Lo que hizo para sacárselo de encima fue dejarlo en manos de una compañera de la Academia de Bellas Artes de San Fernando, una mujer que se llamaba Margarita Manso. 

Se dice que con ella tuvo una única relación sexual. Hay quien lo pone en duda, pero Dalí dice que sí que ocurrió.

Se dice que con ella tuvo una única relación sexual. Hay quien lo pone en duda, pero Dalí dice que sí que ocurrió. Desde el punto de vista amistoso, tuvo muy buena relación con mujeres, fue un muy buen captor de la perspicacia, la psicología y la personalidad femenina.

  • ¿Qué es lo que más te ha sorprendido de Federico García Lorca tras los dos años de investigación?

Justamente el itinerario ideológico de sus amantes. Solo hubo uno, Rafael Rodríguez Rapún, que era un militante socialista que con la guerra estuvo en el ejército popular, fue teniente y murió. El último de todos, un adolescente de Albacete que conoció en 1934 o 1935, hay discusiones sobre qué año fue, acabó siendo falangista y se fue a Rusia para luchar en la 'División Azul'. Luego acabó su vida trabajando en el periódico de ABC, que era el medio más de derechas que había. Este itinerario raro es el que me llamó la atención, me capturó para ponerme a escribir sobre Lorca, algo que nunca había tratado. 

Pablo-Ignacio de Dalmases con su libro
Según Dalmases, a García Lorca no lo asesinaron por homosexual | Catalunya Press
  • Dices que tu propósito con este libro es “tratar de valorar hasta qué punto la identidad sexual de Federico pudo ser la causa determinante del crimen”. Después de toda la entrevista, intuyo que el veredicto es que no, ¿cierto?

Exacto, pudo ser un factor coadyuvante en la Granada de los años 30, pero no creo que fuese LA causa. Uno de los sublevados dijo que sí, que "lo matamos por maricón, y además cuando lo matamos, le metí dos tiros por el culo", pero no creo que fuera la causa determinante. Hay una frase que me parece definitiva que un autor revela que le dijo Luis Rosales, que fue precisamente quien protegió a Lorca y lo tuvo en su casa para que no lo detuvieran, pero al final no lo pudieron evitar. Rosales explica que recibió un anónimo diciendo: "No lo hemos matado por maricón, lo hemos matado porque no era un maricón de los nuestros". Por lo tanto, fue una causa ideológica. 

También hay que puntualizar que, en el verano del 36 en la zona sublevada, todo el mundo se disfrazó poniéndose una camiseta azul. Con lo cual, ha quedado en la leyenda de que lo mataron los falangistas, pero el historiador Ian Gibson lo desmiente.

"No lo hemos matado por maricón, lo hemos matado porque no era un maricón de los nuestros".

Hay que decir que, aunque Lorca fue considerado un hombre de izquierdas, tuvo muy buenos amigos en la Falange, incluso alguno le desaconsejó que se fuera a Granada, porque aquello era "la boca del lobo". Tenía muchos amigos falangistas, e incluso se dice que llegó a conocer a Primo de Rivera, cosa que no está probada y que algunos desmienten. 

No lo mataron los falangistas, Gibson dice que lo mataron personas de derechas, los que pertenecían al Partido de Acción Popular, que era la derecha católica de los tiempos de la República. Siendo un hombre de izquierdas, no fue una víctima de los falangistas.