Un detalle de la portada del libro

''El pañuelo de mamá'', un cuento infantil de la nigeriana Chimamanda Ngozi Adichie

La escritora, autora de una amplia obra literaria, escribió un cuento infantil ilustrado por Joelle Avelino

Aunque la escritora nigeriana Chimamanda Ngozi Adichie se ha caracterizado por una obra literaria en la que ha dedicado especial dedicación a temas como la inmigración, el sexismo y el feminismo, también ha sido autora de relatos cortos e incluso de algún cuento infantil como es el caso de “El pañuelo de mamá” (Beascoa) que ha ilustrado Joelle Avellano con unos inspirados y coloristas dibujos.

Si bien es cierto que circunstancias sobrevenidas, no siempre bien interpretadas en el primer mundo, han creado la impresión de que el uso del pañuelo como prenda femenina de cabeza constituye una rémora, cuando no un signo de sumisión religiosa, lo cierto es que ha sido utilizado por las mujeres en nuestro propio país con harta frecuencia hasta hace muy pocos años y que en otras sociedades sigue cumpliendo un papel que combina la función puramente decorativa con alguna otro de carácter utilitario.

Un pañuelo no solo sirve para recoger el cabello, sino para muchas cosas más. Como descubrirá Chino, cuando su madre le deja el suyo y ella juega con él a lo largo de la jornada, disfruta con la belleza de su polícromo diseño, lo exhibe a sus abuelos y en definitiva se familiariza con un elemento de la vestimenta femenina propio de su mundo.

Como cabe suponer por el origen de su autora, el cuento discurre en algún punto del África subsahariana y por tanto todos sus personajes reflejan etnias propias de aquellos pagos, si bien sin identificarlos con ninguno en concreto. Avelino lo ha hecho además tratando de subrayar diferentes tonalidades de piel de tal modo que el relato sugiera un mensaje subliminal de armónica y natural convivencia familiar interracial.