Personas manifestándose frente a un CAP

Trabajadores de los CAP denuncian que se han disparado las agresiones

El pasado 22 de febrero celebraron una concentración frente al Centro de Atención Primaria de Piera para exigir más seguridad

"En términos generales, hemos sufrido 4 veces más situaciones violentas que en los hospitales". Este es el clamor de los trabajadores de los Centros de Atención Primaria (CAP) de la Cataluña Central. Su situación, que consideran límite, la denunciaron el pasado 22 de febrero frente al CAP de Piera (Anoia).

La convocatoria, explica la presidenta de la Junta de Personal, Marta Montero, a Catalunya Press, fue unitaria. "Han crecido las agresiones, y aparte debemos tener en cuenta lo que no se denuncia por parte de los profesionales", lamenta Montero.

Según Comisiones Obreras (CCOO), el 80% de las agresiones recientes han sido en consultas espontáneas o de urgencias. El 20% restante ocurrieron en consultas programadas.

"Es una situación que se está normalizando", apunta Montero, añadiendo que no únicamente las sufren los profesionales de la salud. "No se libran ni los y las administrativas que contestan al teléfono", añade.

El refuerzo de seguridad, "en estudio"

La vigilancia en los CAP corre a cargo de empresas de seguridad privada, que a su vez contrata el Institut Català de la Salut (ICS). En el caso de los territorios situados en el corazón de Cataluña, según las denuncias de los sindicatos, la seguridad es insuficiente.

"Hemos pedido un refuerzo, pero nos dicen que está en estudio, es una decisión que depende de Barcelona", señala Montero. La presidenta de la Junta de Personal coincide con los sindicatos en que, en muchos casos, la situación es "insostenible".

"Estamos para ayudar, no para que nos agredan"

Tras la convocatoria del 22 de febrero, y de lamentar que no hay una fecha fijada para abordar la problemática, Montero dice que "seguiremos con las movilizaciones". De hecho, asegura que casos así no ocurren únicamente en las poblaciones del centro de Cataluña. "Este crecimiento también se da en otros puntos", lamenta.

¿Y por qué ocurre? Los recortes que la sanidad catalana ha sufrido en los últimos años ha tenido consecuencias. "Hay una gran presión asistencial y se ha perdido calidad en la atención", analiza Montero, que sin embargo asegura que "estamos para ayudar, no para que nos agredan".

"Hay personas que hacer reclamaciones de la forma correcta, pero también hay otras que no. Y debemos decir basta", concluye Montero.