Una ambulancia amarilla con la inscripción "emergències mèdiques" en catalán está estacionada en una calle urbana.

Final de junio para olvidar en las carreteras catalanas: 8 víctimas mortales en 3 días

La N-340, la Ap-7 y la C-63 fueron algunas de las vías donde ocurrieron los siniestros

Aunque desde las autoridades de tráfico se temía que el fin de semana largo de San Juan (el penúltimo fin de semana de junio y el pasado lunes 24) pudiera ser complicado en las carreteras, la realidad es que el final del mes pasado fue mucho peor.

Y es que en únicamente 72 horas, 3 días, se han registrado hasta 8 víctimas mortales en varios puntos de la red viaria de Cataluña. 

El primero de ellos ocurrió cuando pasaba media hora del punto del mediodía del pasado jueves 27, cuando un motorista chocó lateralmente con un turismo en la C-63, a la altura de Cellera de Ter (La Selva). El motorista fue trasladado en estado crítico al hospital, donde falleció.

Al día siguiente, el viernes 28, cerca de las de las 7:30 de la mañana, en la autopista AP-7 a la altura de Castellví de Rosanes (Baix Llobregat), un camionero que viajaba hacia Barcelona chocó contra el tráiler que tenía delante, involucrando a un tercer vehículo. El hombre quedó atrapado en la cabina y, a pesar de los esfuerzos de los Bomberos por liberarlo, no se pudo salvar su vida.

Poco rato más tarde, sobre las 11, un vehículo se salió de la vía en la T-321, a la altura de Vilanova d'Escornalbou (Baix Camp). Tras chocar, el coche se incendió y el conductor, un hombre de 73 años vecino de este publo, murió entre las llamas.

Horas después, sobre kas 17:15, en la A-2 a la altura de Collbató (Baix Llobregat), una colisión por alcance entre una grúa y un camión dejó al conductor de la grúa, un vecino de Viladecans de 51 años, atrapado en el vehículo. Fue trasladado de urgencia a un hospital, donde falleció.

El fin de semana no mejora

El sábado 29, hacia las 16:15, un camión se salió en el enlace entre la AP-7 y la C-14 en Vila-seca (Tarragonès) y acabó volcado. El conductor resultó herido leve, mientras que el pasajero delantero, un vecino de Vic de 29 años, murió.

Para terminar estas jornadas trágicas, el pasado domingo 30 se produjo el más grave de la serie, en la C-37 a la altura de Castellfollit del Boix (Bages) en un choque frontal entre un coche y una furgoneta en la que se vio un tercer coche implicado. Fruto de este accidente, murieron los dos ocupantes de uno de los turismos y el pasajero de a la furgoneta. Se trata de un vecino de Barcelona de 34 años y una vecina de Vic de 35 años, en el caso del coche, y un vecino de Manresa, de 43, en el caso de la furgoneta.

Además, seis personas resultaron heridas, tres en estado crítico y tres en estado menos grave.