El secretario general de CCOO, Unai Sordo; la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, posan durante la firma de un acuerdo de diálogo social con UGT y CCOO

El Gobierno da luz verde a que se compagine el paro y el trabajo: ¿Cómo funciona?

Este complemento salarial se aplicará una vez el desempleado haya agotado 12 meses de prestación

El Gobierno ha anunciado un acuerdo viable para reformar los subsidios al desempleo. Estas ayudas benefician a aquellos que han agotado su prestación por desempleo y mejoran las cuantías, simplifican trámites y amplían los beneficiarios.

Además, introducen una novedad importante: permitir la compatibilidad entre el paro contributivo y los subsidios con el empleo.

El Ministerio de Trabajo propuso que se pueda trabajar a jornada completa y cobrar el paro, un cambio significativo respecto a la normativa actual que solo permite esto en trabajos a jornada parcial.

Sin embargo, esta medida tiene limitaciones, aplicándose solo a sueldos menores a 1.350 euros al mes, con una duración máxima de seis meses y prevista para el próximo año. El objetivo es incentivar la inserción laboral manteniendo parte de la prestación por desempleo.

Este complemento salarial, destinado a apoyar el empleo, se aplicará una vez el desempleado haya agotado 12 meses de prestación contributiva.

Solo a partir del decimotercer mes de paro se podrá optar por cobrar el complemento, lo que implica que solo quienes hayan trabajado previamente más de tres años y medio podrán hacerlo. De hecho, de acuerdo con el artículo 269 de la Ley General de la Seguridad Social, para tener derecho a una prestación por más de 360 días (un año), se requiere haber cotizado al menos 1.260 días, es decir, tres años y seis meses.

La cuantía del complemento será similar al subsidio por desempleo, ascendiendo a 480 euros al mes los primeros tres meses y reduciéndose progresivamente en los trimestres siguientes.

Esta medida entrará en vigor plenamente el próximo año, aplicándose a las prestaciones reconocidas a partir del 1 de abril de 2025.

Aunque el texto de la reforma aún no está completamente cerrado, se espera que pase por el Consejo de Ministros mediante un real decreto ley para cumplir con los plazos acordados con la UE.

Sin embargo, persisten dudas entre los sindicatos, especialmente en torno al derecho de opción, que consideran crucial para los trabajadores que vuelven a quedar desempleados después de un trabajo de larga duración.

Declaraciones de la UGT

El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha vuelto a asegurar que la reforma del subsidio del paro también beneficia a las empresas, y no solo a los trabajadores, pese a la negativa de las organizaciones empresariales a suscribir el acuerdo este miércoles junto a los sindicatos y el Gobierno.

En declaraciones en '24 Horas' de RNE, Álvarez ha explicado que esta reforma parte del principio de que las personas que están en el desempleo tienen que recibir orientación y formación laboral para que así tengan la posibilidad de entrar a trabajar "en uno de esos múltiples puestos de trabajo que los empresarios dicen que no se cubren" en España.

Asimismo, frente a las críticas de la patronal, que ha tildado este acuerdo de "electoralista", el secretario general de UGT ha lamentado su "manía" de que cada vez que hay elecciones en España no se puede hacer nada.

"En España hay elecciones cada poco, tenemos 17 Comunidades Autónomas que deciden cuando convocan la cita con las urnas", ha recordado.

UGT espera ahora que esta reforma consiga la luz verde del Congreso para convertirla en ley, un paso imprescindible para que España logre el cuarto desembolso de los fondos europeos Next Generation.

"Sinceramente creo que esto es un acuerdo que finalmente la suma y la resta va a salir favorable para el Estado. No se podía esperar más, porque podemos perder los 800 millones de los fondos Next Generation", ha manifestado Álvarez.