Esta foto tomada el 14 de abril de 2024 muestra destellos de explosiones en el cielo sobre Jerusalén mientras el sistema antimisiles Cúpula de Hierro de Israel intercepta misiles y drones provenientes de Irán.

Irán ha lanzado contra Israel al menos 170 drones y 150 misiles

Teherán relata un "ataque por saturación" en el que los aviones no tripulados han actuado como pantalla

El ejército de Israel ha confirmado que el ataque directo de Irán, anunciado por Teherán como operación 'Promesa Verdadera', incluyó el lanzamiento de 170 drones, 30 misiles de crucero y 120 misiles balísticos, "un 99 por ciento" de los cuales fueron interceptados por los sistemas defensivos israelíes, según los militares.

El jefe de portavoces del ejército, el vicealmirante Daniel Hagari, ha asegurado que todos los aviones no tripulados y los 30 misiles de crucero fueron derribados por "las fuerzas aéreas de Israel y sus aliados", y que la "inmensa mayoría" de los 120 misiles balísticos fueron interceptados por Arrow ('La Flecha'), el sistema de defensa aérea de largo alcance.

Fuentes norteamericanas han confirmado que el ejército estadounidense ha derribado varios drones iraníes sin dar un número exacto, así como aviones de combate jordanos. Otros drones fueron interceptados cerca de la frontera sirio-iraquí.

Hagari ha reconocido, no obstante, que algunos de estos misiles balísticos lograron atravesar la protección y llegaron finalmente a la base aérea de Nevatim, en el sur del país.

El portavoz militar israelí, en este sentido, ha confirmado "pequeños daños" en la infraestructura de la base aérea. Sin embargo, ha querido puntualizar el vicealmirante que el ataque no afectó en absoluto el funcionamiento de la instalación.

Un ataque por saturación

La agencia semioficial iraní Tasnim, muy cercana a la Guardia Revolucionaria de Irán, relata un ataque en dos fases en el que los aviones no tripulados tenían la misión de saturar las pantallas de defensa israelíes para evitar que se concentraran en el peligro que representaban el resto de los proyectiles.

"Al lanzar cientos de aviones kamikaze Shahed 136 desde diferentes zonas hacia objetivos específicos, la Guardia Revolucionaria ha logrado concentrar todo el poder de los sistemas de defensa de Israel. Esto provocó que la red de radares israelíes quedara prácticamente saturada e incapaz de dedicarse a otros objetivos", añade.

Tasnim destaca que la Fuerza Aeroespacial de la Guardia Revolucionaria ha utilizado esta táctica "en numerosas ocasiones durante simulacros previos", pero "los israelíes nunca llegaron a pensar que sería utilizada contra ellos en una operación real".

El jefe del Estado Mayor del ejército iraní, el general Mohamad Bagheri, procedió luego a explicar la naturaleza de la operación: un ataque contra las bases aéreas de Israel que albergan "los mismos aviones de combate F-35" que, según Teherán desde entonces, bombardearon la semana pasada el Consulado de Irán en Damasco (Siria) y causaron la muerte de varios asesores iraníes.

El general aseguró que Irán evitó deliberadamente "centros económicos y de población" en lo que describe como una exhibición de fuerza de un país "preparado para defender sus intereses y su espacio".

En línea con las primeras declaraciones oficiales de Irán después del ataque, el general ha insistido en que la operación "ha sido completada", antes de agregar que "ha alcanzado todos sus objetivos y que el éxito ha sido total".

"Vemos esta operación como un resultado completo; la damos por finalizada y no tenemos la más mínima intención de continuar a menos que el régimen sionista (Israel) tome medidas adicionales", ha comunicado en unas declaraciones recogidas por la agencia semioficial Mehr.

Asimismo, el general ha anunciado que el Gobierno iraní ha enviado un mensaje a Estados Unidos a través de la Embajada de Suiza, habitual mecanismo de mediación en este tipo de conversaciones, en el que advierte a Washington que se abstenga de activar sus efectivos en la región para apoyar cualquier tipo de represalia israelí, o de lo contrario, Irán no podrá garantizar "ni la seguridad de sus bases ni la del personal".