En medio de un preocupante periodo de sequía en Cataluña, el pantano de Oliana, en la comarca del Alt Urgell, empieza a mostrar una cierta estabilización. Tras las precipitaciones de la última semana en la zona, el embalse ha recuperado parte de su capacidad habitual.
Es una gran noticia para un cuerpo de agua que estuvo en horas muy bajas recientemente. Ha estado en estado de emergencia, teniendo que adherirse a la política de restricciones de uso del agua. El pasado mes de septiembre, solamente tenía un 32% de agua. En cambio, ahora ya ha alcanzado el 66%. Es, de hecho, uno de los pantanos de la comunidad en mejor estado actualmente en cuanto a volumen.
Si bien esta mejora es una gran noticia para la zona, las autoridades seguirán controlando, con la prudencia y la obligación de mantener un suministro adecuado de agua en el pantano de Oliana.
El pantano de Oliana, ubicado entre los municipios de Oliana y Peramola, es una importante fuente de abastecimiento de agua en la región. Construido por las Fuerzas Hidroeléctricas del Segre, aprovecha el Grau de Oliana, una formación rocosa que salva un desnivel.
Las restricciones por sequía en Cataluña
Las restricciones por sequía en Cataluña han experimentado cambios significativos recientemente, flexibilizando algunas medidas y estableciendo nuevas regulaciones. Ahora se permite el uso de agua freática o regenerada para el riego de jardines y campos deportivos en emergencias, así como el llenado parcial de piscinas cubiertas y públicas registradas, siempre que se apliquen medidas de ahorro compensatorias.
Por otra parte, se han prohibido las duchas en playas e instalaciones deportivas (durante la fase de emergencia III) y se han establecido limitaciones temporales para la puesta en marcha de nuevas actividades que requieran un uso significativo de agua.