Los Emiratos Árabes Unidos se ha convertido prácticamente en una piscina esta semana, debido a que este martes se vio cometida a fuertes lluvias, vientos y tormentas que azotan varias ciudades del país, incluida la icónica Dubai.
Este clima sin precedentes en la región ha desencadenado una serie de incidentes en la zona, desde calles inundadas hasta cancelaciones de vuelos y deslizamientos de tierra.
Las principales carreteras del país se encuentran afectadas por las intensas precipitaciones, especialmente en Dubai y Abu Dabi, donde las torrenciales lluvias han generado inundaciones y han dificultado enormemente el tráfico vehicular.
Imágenes compartidas en las redes sociales muestran vehículos navegando por mares de agua y personas caminando con el agua alcanzando niveles por encima de las rodillas.
Sin ir más lejos, se ha viralizado un vídeo en el que un hombre aparece dentro del coche y con el agua subiendo cada vez más de nivel.
En el Aeropuerto Internacional de Dubai, al menos 17 operaciones programadas han sido interrumpidas debido a las adversas condiciones climáticas. Según informes de El Correo del Golfo, se han registrado cancelaciones, retrasos y desvíos de vuelos a lo largo del día.
Por otro lado, en la región de Al Qua, en Al Ain, un deslizamiento de tierra ha causado el colapso de una carretera, creando un enorme socavón de varios metros de longitud y anchura.
Ante esta situación crítica, las autoridades de Emiratos Árabes Unidos han instado a la población a permanecer en sus hogares, saliendo únicamente en caso de extrema necesidad, hasta que las condiciones meteorológicas mejoren, lo cual se espera ocurra para este miércoles.
Lluvia provocada
Hay que tener en cuenta que Dubai tiene un sistema para provocar lluvias, ya que en una zona en la que suelen ser escasas y poco frecuentes. Los científicos han puesto en marcha drones equipados con sistemas de descarga eléctrica, los cuales vuelan a alturas estratégicas para cumplir su cometido.
Estas descargas eléctricas buscan alterar las propiedades físicas de las nubes, desencadenando una liberación de agua que eventualmente cae en forma de lluvia sobre la ciudad.
El proceso implica cargar las nubes con iones mediante los drones, lo que agiliza y facilita la condensación del agua en su interior, hasta que finalmente se precipita en forma de lluvia sobre la tierra.
Aunque no es la primera vez que se intenta manipular las nubes para inducir la lluvia mediante tecnología, este método se ha destacado como el más efectivo hasta la fecha.