Las obras de mejora ambiental y paisajística en el Turó de la Seu Vella de Lledia están en su fase final... hasta el punto que se espera que concluyan en abril, según han anunciado las autoridades locales. Este proyecto, que forma parte de la iniciativa URBAN-NAT Lleida financiada por fondos NextGenerationEU, tiene como objetivo principal la creación de espacios verdes y refugios climáticos en áreas urbanas para combatir el cambio climático y fomentar la biodiversidad.
Entre las acciones realizadas se destaca el acondicionamiento de un paseo sombreado desde la puerta del León hasta una nueva balsa naturalizada en el Parque de Santa Cecília, sobre las calles Monterrey y del Orfeó Lleidatà. Además, se ha trabajado en la estabilización de taludes, la mejora de la vegetación y la plantación de 178 árboles y más de 2.000 plantas.
Estas medidas tienen como propósito consolidar y conectar espacios con árboles, creando refugios climáticos urbanos y zonas de ambientes naturales con matorrales de plantas aromáticas para la biodiversidad local, incluyendo insectos polinizadores y aves.
El proyecto, con un presupuesto de 216.369,53 euros y ejecutado por la empresa Agrotécnica del Segrià, es parte de una estrategia más amplia de la ciudad para aumentar los espacios verdes en el entorno urbano y periurbano, en línea con los objetivos de mitigación del cambio climático y promoción de la biodiversidad.
La iniciativa URBAN-NAT Adaptación al cambio climático y mejora de la biodiversidad de Lleida se inscribe en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por el Fondo Next Generation de la Unión Europea. Las subvenciones para este tipo de proyectos son convocadas a través de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITECO), con el fin de promover acciones dirigidas a la renaturalización y resiliencia de las ciudades ante los desafíos del cambio climático.
La Seu Vella es la catedral y monumento más emblemático de la ciudad, se construyó en estilo románico, aunque sus bóvedas son de crucería ojival góticas. Se alza en el cerro conocido como Turó que lleva el mismo nombre, una cerro que domina la ciudad y la comarca del Segrià.