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Vox boicotea a gritos un debate en la Universidad UPF al que no había sido invitado

Todo arrancó cuando Vox presentó una queja en la Junta Electoral de Barcelona porque no les habían invitado al debate

La organización Deba-t suspendió este pasado jueves un debate electoral en la Universitat Pompeu Fabra de Barcelona, tras media hora de tensión entre estudiantes y simpatizantes de Vox, en un acto al que asistieron, entre otros, el candidato del PP, Alejandro Fernández, y la número 2 por la CUP, Laura Vega.

El portavoz de Vox en Cataluña, Joan Garriga, cuyo partido no había sido invitado al acto, ha entrado al auditorio donde se iba a hacer el debate para exigir su presencia, después de que una resolución de la Junta Electoral Provincial este martes obligase a incluir a Vox en la conferencia.

Los ultraderechistas empezaron a gritar: “Sin Garriga no hay debate”, “Una silla para Garriga”, “Libertad”, “Hay que votar a Vox” y “Vergüenza”.

Los gritos se prolongaron a pesar de que la presentadora exigió respeto y silencio en reiteradas ocasiones. "Somos una asociación privada y, por tanto, invitamos a quien nos apetece invitar", comentó Marina Grau, la presidenta del Deba't, quien acabó invitando a los seguidores de Vox a abandonar el recinto. 

Laura Vega, por su parte, también quiso recriminarles su actitud: “Me marcho de este debate, pero me parece una falta de respeto que Vox hable de libertad y cuando llegue a gobernar lo único de lo que habla es de la libertad de los ricos. Lo único que hace es bajar los impuestos, defender a los más ricos. Su libertad es la de unos pocos. Y venid aquí a ensuciar una palabra preciosa como es la libertad, y no sois estudiantes. Lo que ha hecho hoy es una falta de respeto a los estudiantes que se organizan y hoy esto iba de democracia y no tiene ni idea. No debería hablar de libertad cuando la niega a todo el pueblo. Lo que ha conseguido hoy no sirve absolutamente de nada".

Uno de los que no dudó en plantar cara a los estudiantes de ultraderecha fue el miembro de los comunes, Lluís Mijoler. "Habéis interpuesto las correspondientes acciones allí donde toca, en las Juntas Electorales que tocan, y allí se resolverá", argumentaba antes de pedirles al grito de "fascista" que le dejara terminar su discurso.

"¡No me callaréis! ¡Sabéis lo que queréis y no lo conseguiréis, no nos callaréis!", respondía ante el apoyo del resto de estudiantes, quienes cantaron "¡Fuera fascistas de la universidad!".

Todo arrancó cuando Vox presentó una queja en la Junta Electoral de Barcelona porque no les habían invitado al debate, y el organismo les dio la razón. Sin embargo, Deba't presentó un recurso a la Junta Electoral española para evitar su aparición, algo que, finalmente, no lograron.