Mercadona junto a un bol de frutas

Adapta tu dieta a la primavera con la nueva sandía sin semillas de Mercadona

La sandía es conocida por su alto contenido de agua, lo que la convierte en una excelente opción para mantenernos hidratados durante los días calurosos o después de realizar actividad física

Con la llegada de la primavera y el incremento de las temperaturas, es esencial adaptar nuestra dieta para asegurar una adecuada hidratación. ¿Y qué mejor manera de lograrlo que optando por algunas de las muchas y saludables frutas que nos ofrece la naturaleza? Un ejemplo destacado es la nueva sandía sin semillas que ahora se encuentra disponible en Mercadona.

Este producto, un cuarto de sandía con un peso aproximado de 1,9 kg, tiene un precio de 4,35€. En cada 100 g de esta fruta, encontramos 21 calorías, 0,4 g de proteínas, 4,5 g de hidratos de carbono, 0,5 g de fibra y una impresionante cantidad de 94,6 g de agua.

El agua es el componente principal, pero no el único a destacar. Esta jugosa fruta también contiene una variedad de minerales importantes, como calcio, hierro, magnesio, zinc, sodio, potasio y fósforo. Sin embargo, si hay dos componentes que merecen especial atención en la sandía, son el agua y el licopeno.

La sandía es conocida por su alto contenido de agua, lo que la convierte en una excelente opción para mantenernos hidratados durante los días calurosos o después de realizar actividad física.

Además, su consumo regular puede beneficiar significativamente la salud de la piel, ya que la hidratación adecuada es crucial para una piel radiante y saludable.

El licopeno, por otro lado, es un antioxidante presente en la sandía que le da su característico color rojo.

Este compuesto desempeña un papel importante en la protección de nuestras células contra el daño causado por los radicales libres. Además, tiene propiedades antiinflamatorias y se ha asociado con la reducción del riesgo de enfermedades cardíacas y ciertos tipos de cáncer.

Es importante tener en cuenta que el licopeno es liposoluble, lo que significa que se disuelve en grasas. Por lo tanto, para aumentar su absorción, se recomienda combinar la sandía con fuentes de grasas saludables, como el aceite de oliva o el aguacate.

La sandía es una fruta con una larga historia que se remonta aproximadamente 3.500 años atrás en el valle del Nilo. Su cultivo se ha extendido por todo el mundo, y hoy en día, gracias a la innovación, podemos disfrutar de variedades como la sandía sin semillas, que nos brinda no solo un sabor delicioso, sino también una serie de beneficios para la salud.