Patricia Plaja con una imagen de violencia

Cataluña creará una comisión de expertos para luchar contra la violencia vicaria

El grupo estará formado por 10 personas que nombrará la Conselleria de Igualdad y Feminismos

El Consell Executiu del Govern ha aprobado este martes crear un grupo de expertos en violencia vicaria para diseñar una hoja de ruta con mejoras de la protección a menores.

Les encargará crear, en un máximo de seis meses, un informe "que profundice en la comprensión de la violencia vicaria y que establezca una hoja de ruta con propuestas concretas" para prevenir y detectar estos casos y proteger a menores, informa el Govern en un comunicado.

El grupo estará formado por 10 personas que nombrará la Conselleria de Igualdad y Feminismos a propuesta del grupo de trabajo de análisis de feminicidios: serán "personas con experiencia reconocida en los ámbitos de las violencias machistas, de los derechos de la infancia y la adolescencia y de su protección, del derecho y la criminología, de la salud mental y de la investigación" en estas materias.

Tendrán apoyo y acompañamiento metodológico de una universidad catalana, "que se determinará en función de su experiencia en la investigación en el ámbito de la violencia vicaria", y también podrán pedir la participación puntual de entidades o asociaciones dedicadas a sensibilizar y trabajar contra este tipo de violencia.

La creación de este grupo de expertos la acordó el grupo de análisis de feminicidios en una reunión de urgencia que convocó la Conselleria de Igualdad y Feminismos a raíz del triple feminicidio de una mujer y sus dos hijos en El Prat de Llobregat (Barcelona) y también responde a "la acumulación de asesinatos machistas en los primeros cuatro meses del año".

Violencia vicaria

La violencia vicaria es una forma de abuso que se ejerce sobre los hijos como medio para dañar a la pareja o expareja. Aunque no hay agresión física directa hacia los niños, estos sufren consecuencias emocionales y psicológicas devastadoras al presenciar la violencia entre sus padres.

Este tipo de violencia puede manifestarse de diversas maneras, como manipulación emocional, intimidación, chantaje o control coercitivo.

Los niños expuestos a la violencia vicaria enfrentan un alto riesgo de desarrollar problemas de salud mental, como ansiedad, depresión y trastorno de estrés postraumático. Además, pueden internalizar patrones de comportamiento disfuncionales, perpetuando así el ciclo de violencia en generaciones futuras.

La prevención de la violencia vicaria también implica educar a la sociedad sobre los efectos perjudiciales de la exposición de los niños a la violencia doméstica y promover relaciones saludables basadas en el respeto mutuo y la comunicación efectiva.