Ses Fonts Ufanes brotan tras las lluvias, en la finca pública de Gabellí Petit de la Sierra de Tramuntana, a 10 de febrero de 2023, en Campanet, Mallorca

¿Qué es el fenómeno climatológico 'El Niño' y por qué es importante para la sequía?

Podía revertir la situación, ya que suele provocar muchas precipitaciones, pero no ha sido así en Cataluña y ya se va

El fenómeno de El Niño ha marcado un hito importante en su ciclo natural, con implicaciones significativas para España y el resto del mundo. Este fenómeno, caracterizado por un calentamiento del océano Pacífico, ha tenido un impacto diverso en diferentes regiones, especialmente en términos de precipitaciones y sequías.

El fenómeno de El Niño, conocido por su influencia en las temperaturas y los patrones climáticos, ha vuelto a la atención este año, especialmente en lo que respecta a su influencia en España. Según fuentes como la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de EEUU (NOAA), y como ha recogido El Confidencial, El Niño comenzó oficialmente en julio de 2023 y se espera que concluya entre abril y junio de 2024.

En términos de su impacto en España, las regiones del norte han experimentado un aumento significativo en la capacidad de sus embalses, mientras que zonas como Cataluña han continuado sufriendo sequías persistentes. Este fenómeno ha sido especialmente notorio en las cuencas internas de Cataluña, donde apenas se ha registrado un incremento mínimo en las reservas hídricas.

El informe de El Confidencial señala que la transición hacia La Niña, que se espera ocurra con una alta probabilidad para el verano, plantea incertidumbres sobre las precipitaciones futuras en España. Aunque tradicionalmente El Niño ha estado asociado con un aumento en las precipitaciones, el reciente fenómeno ha mostrado un comportamiento atípico en este aspecto.

A nivel global, la transición a La Niña también tiene implicaciones importantes. Se espera un aumento en la actividad de huracanes en el Atlántico debido a La Niña, lo que puede representar un riesgo significativo para zonas costeras. Por otro lado, la transición a La Niña podría contribuir a mitigar algunas anomalías de temperatura en los océanos, aunque persisten incertidumbres sobre su efecto en el clima a largo plazo.

En conclusión, el fenómeno de El Niño y su transición a La Niña plantean desafíos y oportunidades tanto para España como para el resto del mundo en términos de gestión de recursos hídricos, prevención de desastres naturales y adaptación al cambio climático.