Casi un año después de salir del programa de 'Eufòria' de TV3 y coincidiendo con el estreno de la tercera edición, una de las concursantes más populares de la anterior generación del reality musical acaba de lanzar su primer trabajo al mercado. Se trata de Elena - de nombre artístico La Escorcia-, la joven cabaretera mallorquina que conquistó a los espectadores versionando canciones de Edith Piaf, Nathy Peluso o Lizza Minelli. Ahora busca su propio lugar en la industria musical lanzando un EP compuesto por cuatro canciones con las que promete explicar a sus fans la transformación que ha vivido desde que salió del reality musical de TV3. Este domingo en CatalunyaPress entrevistamos a la artista para que nos explique cómo ha vivido el año y cuáles son sus retos para el futuro.
Pregunta: Hace un año que saliste de 'Eufòria', ¿cómo ha sido el camino hasta aquí?
Respuesta: Ha sido el paso a la vida adulta en todos los sentidos. El año que estuve en Eufòria también fue mi último año de carrera (teatro musical) y ha significado un golpe de realidad que había asumido que llegaría tarde o temprano. No ha sido un post Eufòria de ensueño como nos lo venden en todas partes a los que queremos dedicarnos a una cosa tan bella pero también tan dura y difícil, pero es una etapa completamente necesaria. Los sueños son la mezcla perfecta de trabajo y fantasía, y llevo toda la vida equilibrando estos dos mundos como he podido basándome sobre todo en lo más importante, que para un artista siempre tendría que ser el constante aprendizaje, y más al tratarse de un proyecto independiente. Consolidarte como artista es más curro y experiencia y aprendizaje personal y artístico que salir por la tele, a pesar de que evidentemente también ayuda mucho.
P.: Nos presentas cuatro canciones divididas en cuatro actos, ¿qué has querido mostrar con este primer trabajo?
R.: Para mí la música siempre ha estado vinculada al teatro. Yo nunca he querido ser cantante a secas o actriz a secas, yo siempre he querido ser 'performer', de aquí mi devoción por el teatro musical, donde los artistas pueden hacer absolutamente de todo y dónde especialmente en Broadway siempre se ha dado más visibilidad al talento que a la estética del artista, que aquí es una cosa que todavía no es ninguna prioridad. Crecer admirando a prodigios del escenario que nunca han sido reinas de la belleza me ha hecho entender que lo más poderoso del artista es tu verdad, no tu cara bonita, por eso nunca me he sentido nada acomplejada por salirme de la norma desde pequeña, tanto personal como artísticamente. De aquí viene que el EP se diga 42ND STR€€T, la calle más emblemática de Broadway, y honrando mi talla, la 42, mensaje que empoderó a muchos seguidores del programa 'Eufòria'.
P.: Se nota una evolución respecto a tu papel en 'Eufòria'. ¿Has buscado distanciarte de la imagen que proyectaste en el concurso?
R.: Sí y no. No, porque yo siempre he sido mucho “personaja” y en el programa no tuve que interpretar ningún papel televisivo como a veces pasa cuando te plantan mil cámaras en la cara. Pero sí porque al final parece que si no siempre seré “Elena de Eufòria” y hay que dejar claro quién eres tú, más allá de un programa que sirve para entender donde quieres ir pero no para quedar encasillada por siempre jamás. Eso sí, de no ser por el programa nunca me habría planteado hacer mi propia música, solo el programa me demostró de todo lo que podría ser capaz a este nivel, por eso siempre le estaré muy agradecida.
P.: ¿Cómo has cambiado y qué has aprendido de la industria desde que saliste del programa?
R.: Literalmente me he hecho grande con este proyecto. Lo he llevado todo prácticamente sola, pero como siempre digo, en las fiestas donde vayas de invitada antes de beber, bailar y pecar, toca hablar. Y en estos meses he hecho contactos que me han ayudado a dar pasos de gigante cuando me sentía totalmente perdida y pequeña llevando a cabo este proyecto. Empezando por los coaches del programa, que al final entiendes que son compañeros de profesión. En definitiva, he aprendido muchísimo y me siento mucho más preparada para lo que venga.
P.: ¿Tienes buena relación con tus compañeros de edición?
R.: Con unos más que con otros pero al final somos dieciséis y cada uno ha tomado un camino diferente. Cuando nos encontramos con quién sea y donde sea es inevitable el buen rollo porque al final haber vivido una experiencia tan intensa juntos hace que sea inevitable el vínculo indestructible. Los quiero mucho, sobre todo a Emmi, es una bestia musical.
P.: ¿Cómo viste el inicio de esta tercera edición? ¿Tienes algún concursante favorito?
R.: Me llama mucho la atención esta edición y tuve la suerte de poderla vivir en directo desde el plató. Valeria me maravilló en mayúsculas con 'Me quedo contigo', que es una canción que para mí es apoteósica. Las voces de Lluna y Misty son muy interesantes, la personalidad de Yuk, Dounia con su propuesta directa, y Pau tiene algo que me gusta mucho... Ahora, si tenemos que reivindicar cosas, que en la primera gala haya marchado la representación LGTBI no me gustó nada, sobre todo por Tamara que tiene un ángel indiscutible. Y me encanta Maria ,que espero y deseo que para ser rubia y tener los ojos azules los espectadores no la encasillen en el perfil de pubilla porque es muy rockera y cañera, nada que ver con Mariona o Alexia, que ya nos conocemos… La conozco desde los castings de Eufòria 2, hemos quedado un par a veces y es una tía increíble.
P.: ¿Qué podemos esperar de la Escorcia a partir de ahora?
R.: Podéis esperar todo lo que no os esperáis. Durante este proyecto me ha quedado claro que soy una persona artísticamente impredecible e imponente. Creo que vendrá más de todo esto, sorpresa constante sin salirse de la marca Escorcia, que vendría a ser temática cabaret burlesque que viaja hasta tiempo presente sin dejar de sorprender en el nivel estilístico actual. También me gustaría realizar alguna colaboración musical de alguien de quien contagiarme y continuar aprendiendo en grande. Y aparte de más música, se vienen más cosas pero hasta aquí puedo decir.
P.: Tienes un perfil perfecto para Eurovisión y que posiblemente encantaría a los eurofans. ¿Te presentarías a la próxima edición del Benidorm Fest como ha hecho Sofía Coll este año?
R.: Tengo que decir que me llegaron muchísimos mensajes pidiéndome que me presente el año que viene al Benidorm. Eurovisión es un formato que miro religiosamente cada año, y siempre le digo a mi madre que antes de morir me encantaría ir de público pero quién sabe... La verdad es que después de este proyecto sí que me veo presentando una cosa potente y, sin engañarnos, creo que me pega muchísimo el formato, pero al final son contactos. Espero poder sorprenderos en menos de lo que os esperáis.