Las peregrinaciones forman parte de la vida de bastantes personas que buscan en muchos casos encontrarse a sí mismos, o esperan un milagro, quizás reflexionar sobre lo que están siendo sus vidas y tomar decisiones. También los hay que su objetivo es tener experiencias de aventura y los hay que buscan el perdón, o en algunos casos esperan hacer negocios.
Cada uno de los peregrinos tiene sus objetivos y solo ellos conocen sus verdaderas intenciones, Las peregrinaciones más importantes son la del Camino de Santiago o Lourdes, entre otras. En los últimos siete años, Bruselas y Waterloo se han sumado muchos más a esta lista- que es mucho más larga- para ver, tocar y pedir al Santón Puigdemont por todo tipo de cosas. Se disfraza de un acto de solidaridad con él, por encontrarse “exiliado”, pero la verdad es que el Santo se cree con el poder de conceder milagros de todo tipo, incluidos los negocios. Por allí han pasado desde admiradores fieles, miembros de partidos políticos de casi todos los colores - algunos no han querido que se sepa-, representantes de la cultura afines al procés, empresarios que han contribuido económicamente con el movimiento independentista y en los últimos tiempos hasta una delegación de la patronal catalana Foment del Treball, con su presidente Josep Sánchez Llibre a la cabeza y su correspondiente foto que daba fe de la reunión celebrada en Perpiñán.
La patronal Catalana, en un comunicado explicaba que en la reunión se habían hablado entre otros temas de fiscalidad, la ejecución de inversiones o de una mayor “seguridad jurídica”. Este último tema es muy adecuado hablarlo con alguien que ha huido de la justicia. Por cierto, la reunión no le ha sentado nada bien a la ANC, quien en su día fue denunciada por Foment por impulsar una campaña de “consumo estratégico”, es decir, apoyar a las empresas que ponían pasta para el procés. Una acción muy democrática. Claro que el presidente “exiliado” eso de pactar, lo sabe hacer muy bien y no le importa con quién. Además ha sido un acto más de precampaña que no le ha costado ni un euro en inversión en los medios, le ha salido gratis total con la ayuda de Foment.
Josep Sánchez Llibre, conocido como el “conseguidor”, ha dado buena cuenta de ello en su etapa de diputado en el Congreso de los Diputados. Allí era conocido por sus reuniones con empresarios, instituciones y empresas. Un trabajo “excelente”, tenía un buen maestro en su compañero de partido - jefe también- Durán Lleida, el inquilino ilustres del hotel Palace. Y es que los democristianos tuvieron en su día una gran ascendencia en la política – el poder- especialmente en Italia con su máximo representante Giulio Andreotti. Son unos negociadores de altura y en Catalunya eran únicos.
El presidente de Foment, con una gran experiencia en política, ha cambiado ese sombrero por el actual de empresario, pero no pierde su estilo negociador y es capaz de pactar con el diablo- con permiso de Dios- si con ello alcanza sus objetivos. Claro que en esta ocasión creo que se ha equivocado, al adelantarse tanto. No era el momento,y a muchos empresarios que no están en la onda de Puigdemont, se les ha helado la sonrisa y no comparten la decisión. Es un error imperdonable en alguien con las tablas que tiene. Habrá personas que afirman que el presidente de los empresarios catalanes ha aplicado en ese peregrinaje al Santón Puigdemont como un acto de sacrificio y reflexión por el bien de Catalunya ¿Del suyo también? Es lógico. No sé quién dijo con razón que "más que las ideas, a los hombres los separan los intereses."