El Centro de Análisis Funcas estima que actualmente alrededor de 700.000 personas extranjeras residen en situación irregular en España. Esto se basa en sus cálculos, que indican que a principios de 2023 ya había 686.111 personas en esta condición en el país, y la tendencia es creciente.
Esta cifra del año pasado representa un aumento del 32,67 % con respecto a la observada en 2021, cuando la misma entidad registró que había 517.149 personas en situación irregular. Además, es más de cinco veces superior a la cifra observada en 2017, cuando se contabilizaban 127.066 inmigrantes en esta condición.
Además, se estima que alrededor del 17 % de la población extranjera no comunitaria que reside en España, es decir, aquellos con nacionalidades distintas a las de los estados miembros de la Unión Europea, Reino Unido, Islandia, Liechtenstein, Noruega y Suiza, se encuentra en situación irregular.
Según el informe trimestral Notas de Coyuntura Social, los datos recabados de fuentes oficiales como el Instituto Nacional de Estadística y el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones indican un significativo crecimiento en la población de nacionalidades no comunitarias desde 2017. En 2023, esta población alcanzó un nuevo máximo de 4,1 millones de personas, y se estima que en 2024 habrá alcanzado un nuevo pico cercano a los 4,4 millones de inmigrantes provenientes de estos países.
Dentro de la población extranjera sin documentos en España, sobresalen las nacionalidades americanas, con alrededor de 600.000 personas, seguidas muy de lejos por las europeas no comunitarias, con aproximadamente 51.000, y las africanas, con cerca de 35.000.
Funcas hace mención en su informe a la Iniciativa Legislativa Popular (ILP), cuya tramitación inició en el Congreso de los Diputados el pasado mes de abril. Esta iniciativa propone una regularización extraordinaria de los extranjeros que ya se encontraban en territorio nacional antes del 1 de noviembre de 2021.
Los promotores de esta iniciativa, que consiguió más de 600.000 firmas de ciudadanos españoles de apoyo, cifran en unas 500.000 las personas que se beneficiarían de esta regularización, pero Funcas advierte que, según sus datos, todavía habría unos 200.000 inmigrantes que se quedarían fuera.